Los desarrolladores del arma, diseñada sobre la base del subfusil Vítyaz-SN, han perfeccionado su ergonomía y equipamientos adjuntos.
Rusia ha finalizado las pruebas estatales del nuevo subfusil de calibre 9 mm Kaláshnikov PPK-20, informó este miércoles el servicio de prensa del homónimo consorcio armero ruso.
El diseño del PPK-20 se deriva de otro subfusil ruso producido en serie, el Vítyaz-SN. El nuevo Kaláshnikov incorpora mejoras en su ergonomía y confiabilidad, así como un dispositivo que silencia el ruido de los disparos, indica el comunicado del consorcio.
El equipamiento del Kaláshnikov PPK-20 incluye también un cinturón con uno y dos puntos de fijación, así como una bolsa de camuflaje diseñada para la transportación de dispositivos de fijación y de supresión del sonido del disparo, cargadores y engrasadores.
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