Una suma de factores son la gran preocupación de la economiza mundial. Si bien el coronavirus se ubica como un detonante, la realidad es que no es el único fenómeno que a puesto podría llevar a un momento de crisis al crecimiento internacional.

Lo cierto es que no sólo se trata del coronavirus. La economía global parece estar arrastrando factores más diversos de que manera casi natural estarían frenando su crecimiento de manera importante.

En números

Estimaciones entregadas por Euromonitor indican que tres factores de riesgo son los que podrían “sobre las cuerdas” a la economía mundial este año: la guerra comercial, la caída del consumo y el coronavirus.

Esto tiene sentido si consideramos que hasta principios de marzo se estimaba que el brote de COVID-19 en China habría provocado una contracción del 2 por ciento en la producción manufacturera de que país durante el último mes, al tiempo que causó una pérdida estimada en 50 mil millones de dólares a la economía mundial, según un estudio divulgado por la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD).

De tal manera, desde Euromonitor indican que el crecimiento de las economías avanzadas para este año será de apenas de 1.4 por ciento, mientras que para los países emergentes el avance se pinta algo más prometedor al estimarse en 4.2 por ciento.

¿Peor que en 2008?

Aunque las cifras anteriores podrían no ser tan devastadoras, la realidad es que para algunos especialistas la economía mundial está cerca de un nuevo colapso que será mayor aquel que causó alerta e incertidumbre hace cerca de 12 años.

En una entrevista con el periódico The Independent publicada esta semana, el analista económico Jesse Colombo, reconocido por predecir la crisis financiera de 2018, advirtió que estamos ante una nueva crisis económica mundial, misma que además de ser especialmente alarmante y aunque se verá impulsada por el coronavirus no será provocada únicamente por la pandemia.

“El ciclo ya está muy avanzado, y el coronavirus es básicamente un golpe doble. Pero ya estábamos avanzando hacia la recesión antes de que alguien hubiera oído hablar del coronavirus”, afirmó el experto.

Asimismo, señalo que existen nuevas burbujas que estallarán en mercados alrededor del mundo, las cuales plantearan escenarios de crisis si consideramos que ahora hay mucho más deuda que la que se tenía durante 2008.

“Por muy malo que fuera el 2008, lo que vendrá será peor, porque ahora hay mucha más deuda: casi 100 billones de dólares en deuda nueva”, destacó Colombo.

Las nuevas burbujas que están por estallar

Si bien la caída en el precio del petróleo así como la paralización de diversos mercados por el coronavirus son factores que influirán en la que podría ser la próxima recesión mundial, lo cierto es que no serán los únicos.

A mediados del año pasado, el experto en economía ya habría reconocido burbujas en más de 20 mercados, de las cuales destacan las siguientes:

  • Burbuja tecnológica: protagonizada por nuevas empresas que no son económicamente viables y viven del estimulo.
  • Burbuja de energía: enfocada en la búsqueda de nuevas fuentes energéticas en donde la perforación horizontal y la fractura hidráulica son puntos clave.
  • Burbuja de energía del esquisto: el esquisto promete la independencia energética de América como recurso alternativo. No obstante, la rápida dependencia creada alrededor del insumo -el 50 por ciento de la producción de gas de América es ahora de esquisto- comienza a ,mostrar signos de agotamiento del recurso.
  • Burbuja mercado inmobiliario europeo: provocada por las bajas tasas de interés promovidas por el Banco Central Europeo y la disparidad entre el ingreso promedio de posibles compradores y los elevados precios de inventarios en corredores de alta demanda.
  • Burbuja mercado de valores estadounidense: se han comprado masivamente bonos basura de empresas y emisiones de países que no podrán devolver su deuda.
  • Burbuja de crédito china: impulsada en gran medida por el gasto elevado en infraestructura.