Falta claridad sobre las medidas de soporte para la economía ante la crisis del coronavirus
Duró poco el optimismo del martes en los mercados.
Todos los índices de la Bolsa se mantuvieron en fuertes pérdidas todo el día y el Dow Jones cerró con una pérdida de 1,467 puntos (-5.86%),el S&P500 se dejó el 4.89% y el Nasdaq perdió 392 puntos o el 4.70%. El petróleo, sin de momento salida a la tensión que Arabia Saudí y Rusia han añadido a su cotización, se depreció un 5%.
Oficialmente se está en lo que los inversionistas conocen como un bear market, dominado por el pesimismo tras la rebaja acumulada del 20% del valor desde que se llegaron a máximos en las cotizaciones en febrero. Se acaba así una tendencia alcista conocida como Bull, de optimismo, que ha durado 11 años.
El bono del Tesoro a 10 años ha recuperado parte del terreno cedido en los últimos días pero su rentabilidad ronda el 0.8% y la tendencia del día fue al alza.
No hubo de donde sacar noticias positivas. Las medidas económicas para contrarrestar el efecto del coronavirus no se concretan y las que estudia la Administración, como la eliminación de los impuestos a las nóminas, no convencen y hay dudas de que puedan salir adelante. Eliminar estos impuestos puede costar más de $1.1 billón (1.1 trillion) este año cuando ya el déficit está en el camino previsto de cerrar el año con un déficit de más de un billón (a trillion). Es algo que compromete la viabilidad de muchos programas sociales y perjudicaría significativamente al Medicare y el Seguro Social.
Reducir o eliminar este impuesto no va a solucionar el problema de demanda que existe en este momento.
El secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, confirmó que se está estudiando extender el plazo para la presentación de impuestos más allá del 15 de abril y se quiere buscar autorización para ampliar los préstamos a los pequeños negocios. La Administración quiere también ver la posibilidad de ofrecer garantías en los préstamos para aerolíneas y empresas de cruceros que han sido ya muy golpeadas por la crisis.
El presidente tenía previsto hablar a las 9.00 PM. Donald Trump, que ha estado minimizando los efectos del coronavirus al compararlo con la gripe, se reunió con directivos de Wall Street que le aseguraron que la banca goza de buena salud y que la crisis no es financiera.
Mientras se negociaban medidas como la licencia pagada por enfermedad en el Congreso, la OMS consideró oficialmente que estamos ante una pandemia. Mientras la enfermedad avanza, algunas empresas están aceptando estas licencias pagadas por enfermedad. Darden Restaurants, matriz de restaurantes como Olive Garden, acaba de instaurar el pago por enfermedad para todos sus empleados. Otras empresas solo lo hacen para esta situación como Trader´s Joe y McDonald´s (solo en los locales suyos, no en los franquiciados) y las compañías tecnológicas están instando a sus empleados a trabajar desde casa. Amazon también tiene una política de dos semanas pagadas en caso de coronavirus. Eventos empresariales, deportivos y culturales además de conferencias están siendo canceladas.
Las estadísticas de otros países y los cierres de actividad que ha habido en China muestran que la mejor manera de atajar la rápida expansión del COVID-19 es la cuarentena y el cierre de actividades. Mientras se siguen aplicando protocolos estrictos para hacer pruebas de la enfermedad en EEUU y estas pruebas están muy por debajo de las que se hacen en otros países, la canciller alemana, Angela Merkel ha advertido a la población que el 70% podría enfermar. La enfermedad ha revelado ser letal especialmente en casos de bajas defensas, personas mayores, y pacientes con cuadros respiratorios comprometidos.