Quizá no estemos acostumbrados a ver coches deportivos de Hyundai, pero su último coche eléctrico es una berlina deportiva; o lo parece, al menos. Porque visto desde el exterior, el nuevo Hyundai Prophecy nos ofrece una propuesta muy interesante y atractiva: una berlina ancha, muy bajita, con un techo muy curvado y unas superficies muy limpias que adelantan el nuevo lenguaje de diseño de la firma coreana.
El nuevo Hyundai Prophecy presume de la última filosofía de diseño de Hyundai, llamada Sensuous Sportiness, que hace gala de unas líneas limpias y minimalistas. Su pequeño capó frontal no impide que las proporciones del coche acaben resultando francamente atractivas, apoyadas por una gran distancia entre ejes y unas llantas de gran diámetro.
El Hyundai Prophecy tiene una silueta esbelta y muy aerodinámica.
Basta ver la silueta del Prophecy para comprobar su estupenda aerodinámica. Una línea recorrela carrocería uniendo la rueda delantera con la trasera, la cual busca dar la impresión de que el coche se impulsa hacia adelante incluso estando parado. En la parte trasera, las aletas se ensanchan y remarcan una zaga voluptuosa, más ancha que el frontal.
El alerón trasero complementa el trabajo realizado a nivel aerodinámico, aportando fuerza descendente parar mejorar la estabilidad del coche a alta velocidad; una aerodinámica a la que también contribuyen la toma de aire en la parte baja del parachoques (para enfriar la batería) o el diseño de las llantas con radios en forma de hélices.
En la zaga encontramos unos pilotos con LED pixelados, una tecnología que veremos en los futuros Hyundai.
Un detalle muy llamativo son los grupos ópticos, que emplean unos paneles luminosos con LED pixelados integrados en el paragolpes para dibujar la firma lumínica. Esta tecnología fue vista por primera vez en el prototipo eléctrico Hyundai 45 EV Concept, pero ahora han dado un paso más allá y la iluminación se ha integrado en el faro, en la luz trasera y el alerón.
Estos paneles de luz LED pixelados serán uno de los elementos de diseño que heredarán los futuros modelos de Hyundai, por lo que nos acostumbraremos a verlos con el paso del tiempo. En cuanto a los faros, están hechos con un material acrílico transparente que permite ver los componentes del interior (el alerón y el sistema de vigilancia por cámara están hechos con el mismo material).
Puesto de conducción del Hyundai Prophecy.
Y si por fuera es llamativo, el diseño interior del Prophecy no se queda atrás. Eso sí, las sensaciones deportivas del diseño exterior se desvanecen al descubrir que Hyundai propone un coche autónomo que no necesita volante. En lugar de un volante, hay dos joysticks que pueden girar a la izquierda y a la derecha, uno en la consola central y otro en el embellecedor de la puerta. Desde los joysticks se tiene acceso también a las funciones del sistema multimedia y la interfaz hombre-máquina.
El interior ha sido diseñado para ofrecer una gran amplitud a todos los pasajeros, y sin demasiados obstáculos visuales que impidan ver los contenidos de la gran pantalla horizontal del salpicadero. Así parecen ser los nuevos tiempos. En el modo Relax del coche, el salpicadero pivota y permite tener un interior más espacioso y una posición del asiento reclinada para disfrutar más cómodamente de los contenidos digitales. Todo ello aderezado con un sistema de purificación del aire y materiales sostenibles.
Acceso al habitáculo del Hyundai Prophecy.
De lo que no ha hablado Hyundai es de la potencia del motor, de las baterías del Prophecy o de su autonomía. Tampoco ha revelado si lo veremos en el mercado, y es que el Prophecy es, ante todo, un ejercicio de diseño que anticipa las futuras líneas maestras de la compañía coreana.