Con millones de pasajeros al día, el Metro de Nueva York, en su sistema subterráneo y de buses, podría ser un vector muy fácil para expandir el coronavirus.
Aunque no hay casos confirmados del COVID-19 en Nueva York, como medida de previsión la Autoridad Metropolitana de Transporte (MTA) ha comenzado a reforzar sus mensajes para prevenir esta enfermedad, que se ha ido expandiendo por el planeta, calificada de nivel de riesgo “muy elevado” por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Estos mensajes básicos, acordes con los de los Centros para el Control de Enfermedades (CDC), instan a los pasajeros a:
- Cubrirse la nariz y la boca al toser y estornudar.
- Lavarse bien las manos con agua y jabón.
- Evitar contactos con enfermos.
- No usar el transporte público si hay síntomas de fiebre, tos o problemas para respirar. Si es el caso, buscar atención médica de inmediato.
Estos mensajes sanitarios se mostrarán en 3,600 pantallas del Metro, 2 mil de autobuses, 550 de ferrocarriles suburbanos y 84 entradas de estaciones en inglés, chino, español, ruso y coreano, según un comunicado de prensa de MTA.
También MTA ofrecerá horarios extendidos para que los empleados se vacunen contra la gripe como parte de las precauciones.
Los funcionarios de la MTA tienen planes de emergencia preparados para enfrentar las crisis de salud pública, aseguró Patrick Warren, director de seguridad de la agencia.