En España se han establecido estrategias nacionales para el abordaje de enfermedades respiratorias, algo que no ha pasado con el asma. Y todo, a pesar de que se trata de una enfermedad que en el año 2017 produjo más fallecimientos que los accidentes de coche en España. Es por eso que ahora las tres sociedades científicas de Familia -SEMG, Semergen y Semfyc-, junto a la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ) y la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (Seaic), están haciendo un llamamiento especial de esta situación a través de una estrategia conjunta.
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Franciso José Sáez explica que en el año 2017 fallecieron más personas por asma que por accidentes de tráfico. |
Así lo ha explicado Francisco José Sáez, médico de Familia del Centro de Salud Araganda del Rey y miembro del Grupo de Patología Respiratoria de la SEMG, durante la VII Jornada Dual Neumológica que esta sociedad científica ha celebrado durante los días 28 y 29 de febrero en Málaga.
Durante la ponencia ‘El asma como problema sanitario global. Posicionamiento de las sociedades científicas’ Francisco José Sáez ha explicado que están haciendo una estrategia entre las cinco sociedades científicas para hacer una valoración especial sobre el asma «que tanto la población como los sistemas sanitarios obvian«.
En este sentido, los ponentes de esta sesión plenaria han manifestado tres líneas. La primera de ellas es un manifiesto de las sociedades científicas que se va a publicar próximamente en la revista de Semergen. En él, las cinco sociedades muestran sus preocupaciones en el abordaje o el cambio en el tratamiento (por ejemplo, señalan que ya no es suficiente la utilización de broncodilatadores de corta duración, sino que, como enfermedad inflamatoria crónica que es, necesita el uso de corticoides inhalados). «Es algo que necesitamos afrontar y ver y que en España, desgraciadamente, no lo estamos haciendo», asegura Sáez.
También han llamado la atención sobre la necesidad de una estrategia a nivel nacional y que los profesionales tengan en cuenta.
Los no hacer en asma
Mario Bárcena Caamaño, del Grupo de Patología Respiratoria de la SEMG, ha contado qué cosas no hay que hacer en asma: no hay que tratarla con antibióticos ni hay que realizar una serie de actividades diagnósticas «que no tienen sentido». «Porque en ocasiones los sanitarios tenemos la tendencia de hacer muchas cosas en un paciente que lo que hace es que incluso este rechace el acudir a su médico de Familia o a su enfermera de Atención Primaria para hacer un seguimiento», asegura Sáez.
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«Muchas veces tenemos pacientes asmáticos que no saben qué hacer y acaban en urgencias» |
Por su parte, Juan Antonio Trigueros, referente en patología respiratoria de la SEMG, ha explicado el trabajo con la educación para el paciente, así como el plan de seguimiento. «Muchas veces tenemos pacientes asmáticos que no saben qué hacer y acaban en la urgencia hospitalaria. Y eso es un problema que tenemos en el abordaje de Atención Primaria y que nuestros compañeros de hospital de las otras sociedades están de acuerdo en que tenemos que cambiar. Hay que explicarles lo que hacer cuando tengan síntomas», añade Sáez. Porque, en caso de no saber, acudirán al hospital. Y eso, en su opinión, «no tiene sentido».
«Por eso las cinco sociedades científicas queremos trabajar con esa idea de hacer un abordaje común e integrado de los pacientes con asma. Porque a veces se nos olvida y cada especialista hace y se preocupa solo de su parte», asegura.
Problema con los adolescentes
Porque mientras que en EPOC existen planes de actuación integrados en casi todas las comunidades autónomas, en asma no se realiza este tipo de abordaje en ninguna. Tampoco se cuenta con los pediatras para realizar un abordaje continuo a lo largo de esa evolución.
«El problema que tenemos en Atención Primaria es que un paciente diagnosticado de asma en la infancia cuando llega a la adolescencia genera un rechazo a ese tipo de situación. Ese paciente deja de ir al médico y de utilizar su tratamiento que es necesario. Y eso está provocando un aumento del asma grave por el abandono del tratamiento y por la falta de seguimiento del mismo. Eso es lo que vemos en la receta electrónica», asegura Francisco José Sáez.
Actualmente, en España hay una prevalencia de asma de un cinco por ciento en adultos y un diez en niños. «Obviamos que es una enfermedad crónica que tiene una repercusión y una mortalidad importantes. Parece que nadie se muere de asma y no es cierto», concluye Sáez.
 Francisco José Sáez durante un momento de la ponencia ‘El asma como problema sanitario global. Posicionamiento de las sociedades científicas’. |
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