En 2017 se desató la polémica después de que Apple confirmara que bajaba el rendimiento de algunos modelos de iPhone después de ciertas actualizaciones, según la compañía, esto lo hacía para proteger los componentes del dispositivo. Tras esta confirmación, Apple se disculpó y ofreció descuento para los cambios de batería, mientras que algunos usuarios se organizaban para demandar a la compañía por esta situación.
La respuesta a dicha demanda colectiva ha llegado, al menos en Estados Unidos, donde Apple ha acordado pagar hasta 500 millones de dólares por este caso. Podría parecer mucho dinero, pero la realidad es que los usuarios afectados recibirán en torno a 25 dólares cada uno.
Apple sigue negando que hayan hecho algo malo
Según apuntan desde Reuters, la demanda interpuesta ante la Corte de Distrito de EE.UU., en el Norte de California, señala que Apple llegó a un acuerdo con los abogados que los están demandando en nombre de todos lo usuarios afectados, o al menos que se sumaron a la demanda colectiva.
De acuerdo a los documentos del tribunal, Apple no admite haber ralentizado los iPhone, pero para evitar gastos en juicios y abogados decidió llegar a un acuerdo para poner fin a todo esto.
El acuerdo cubre a los dueños de iPhone 6, 6 Plus, 6s, 6s Plus, 7, 7 Plus y SE en Estados Unidos, quienes hayan tenido iOS 10.2.1 o posterior. Así como a los dueños de iPhone 7 y 7 Plus con iOS 11.2 o posterior antes del 21 de diciembre de 2017. Cabe señalar que estos propietarios tuvieron que haberse sumado a la demanda colectiva.
Un detalles curioso es que los abogados asignarán hasta 310 millones de dólares para los usuarios, ya que ellos se quedarán con unos 93 millones de dólares por concepto de honorarios, más otro millón y medio por gastos operativos y de gestión. Según los abogados, estos pagos son «considerables en cualquier grado», además de ser «justos, razonables y adecuados».