Los clientes que denunciaron esta caída del rendimiento pueden recibir un máximo de 25 dólares por sus dispositivos.
Apple ha acordado pagar hasta 500 millones de dólares para resolver una demanda colectiva de clientes que aseguraban que esa compañía estadounidense ralentizaba el funcionamiento de sus teléfonos antiguos para provocar que compraran nuevos dispositivos o cambiaran las baterías de esos modelos, reporta la agencia Reuters.
Este pacto requeriría que la tecnológica pague alrededor de 25 dólares por iPhone —una cantidad que variaría en función del número de dispositivos se beneficien— hasta un mínimo de 310 millones de dólares y está pendiente de que un juez federal de San José (California, EE.UU.) confirme su validez.
Cada usuario de iPhone mencionado en esta demanda colectiva recibiría hasta 3.500 dólares, mientras que el resto del dinero se destinaría a propietarios de los modelos 6, 6 Plus, 6s, 6S Plus, 7, 7 Plus y SE que presenten una reclamación y cumplan los criterios establecidos, informa la agencia AP.
Estos consumidores insatisfechos aseguran que el funcionamiento de sus teléfonos empeoró tras instalar actualizaciones de ‘software’ y eso les llevó a creer que los aparatos estaban cerca de cumplir su vida útil o requerían que les remplazaran las baterías.
Por su parte, la empresa con sede en Cupertino aprobó el acuerdo para evitar problemas legales, pero atribuyó los problemas a cambios de temperatura, uso excesivo u otras circunstancias y aseguró que sus ingenieros resolvieron esos problemas con rapidez.
Los abogados que representaron a los demandantes estimaron que se trata de un acuerdo «justo, razonable y adecuado», mencionaron que sus expertos estimaron un pago máximo de 49 dólares por iPhone. Así, los abogados obtendrían alrededor de 93 millones de dólares por sus servicios legales.