Esta mañana, Petróleos Mexicanos (Pemex) informó sobre la muerte de otra personas como consecuencia del suministro de medicina contaminada en un hospital de Villahermosa, Tabasco, con esta ya suman ocho decesos.

Sin embargo, estas son cifras que presenta Pemex, pues según los familiares de los afectados, van 14 fallecidos.

Durante un recorrido efectuado este sábado, se constató que la clínica permanece cerrada por ser día inhábil, aunque se sigue atendiendo en el área de urgencias.

Una de las últimas víctimas fue Ricardo «N», quien de 51 personas que necesitarían hospitalización para recibir el medicamento en mal estado, él era el único que continuaba en terapia intensiva con reemplazo renal y un estado de salud que podría ser grave hasta el jueves que murió.

Además, se contabilizaban las muertes de Nahúm “N”, de 71 años Bienvenido “N” de 76 años; María Soledad “N”, de 55 años; Patricia “N” de 54 años; Feliciano “N” de 65 años; Marina “N” de 49 años; Baldemar “N” de 77 años de edad y Javier “N”, de 57 años, a quienes se les suministró el medicamento contaminado, además del fallecimiento de Salvador “N” de 75 años de edad, quien se infectó con la bacteria cuando recibió un cambio de catéter.

De acuerdo a Pemex se seguía dando atención integral a los 51 pacientes que resultaron afectados por la administración de producto contaminado en el lote C18E881 de Heparina Sódica con caducidad de enero 2021 en el Hospital Regional de Villahermosa, Tabasco.

La empresa petrolera emitió un comunicado en el que lamentó lo que sería la octava muerte.

A pesar de las denuncias que interpuso la empresa productiva del Estado ante la Fiscalía General de la República, aún no se actúa contra ninguna persona responsable por la compra y posterior suministro del medicamento Heparina Sódica que estaba contaminado con la bacteria Klebsiella spp.

En primera instancia se había acusado a la farmacéutica PISA de haber sido el proveedor, pero esto fue desmentido por la misma compañía que también exigió por posible falsificación o adulteración de su medicamento.

Además, se dio a conocer que el verdadero distribuidor era José Roche Pérez, por lo que se emitió una alerta sanitaria para que no se le comprara más producto.

De igual manera, Pemex presentó una denuncia de manera individual por las muertes registradas a partir del pasado 28 de febrero y al menos cinco familias demandaron ante la Fiscalía.